POEMAS PARA LA MUJER Escritora Arjona Delia
Escritora Arjona Delia

10 de junio de 2019

DÉCIMAS AL MATRIMONIO CON HUMOR

Unas décimas de humor con la cual quiero demostrar que el amor es ciego.

A MI MARIDO
(Arjona Delia)

Está feliz mi marido
porque es un hombre casado
juntos hemos trabajado
y formamos nuestro nido.
A mi vida da sentido,
día a día me conquista,
dice piropos, me chista,
me dijo: ¡qué linda estás!
Verán, no lo dude más,
y lo mandé al oculista.
 
Mi marido es amoroso
pero cada vez ve menos
y eso me sirve, al menos,
yo lo veo muy valioso.
En la cama es ingenioso,
mi cabellera lo hechiza
me ve linda, se hipnotiza,
si el ojo llega a cerrar,
ahí pongo a remojar
mi dentadura postiza.

Le da a mi vida matiz,
es romántico y sensible,
siempre hace lo imposible
para verme muy feliz.
Y nunca tuvo un desliz,
hacemos buena pareja,
al oído me aconseja
si se queda dormidito,
me quito el audifonito
que tengo siempre en la oreja.

Siempre primero se acuesta,
la cama va a calentar,
luego me empieza a llamar
para empezar una fiesta.
Y yo, para ser honesta
voy al baño ¡y que no entre!
Rogando que no la encuentre
pues la escondo en una caja
es una moderna faja
que me deja chato el vientre.

Nunca se da por vencido,
en la vida siempre avanza,
no doblega su confianza,
se mantiene bien erguido.
Yo el equilibrio he perdido,
me ha salido un espolón,
en el medio del talón,
soy media chueca además,
que no se entere jamás
pues le daría impresión.

Dicen que el amor es ciego,
aquí les doy la razón,
se ama con el corazón,
y a tu alma da sosiego.
Con el viagra siempre hay fuego,
a veces llamo al doctor,
porque es un hombre mayor...
¡Pildorita de la ciencia,
agradezco tu existencia,
que viva este gran amor!




Poema publicado en el libro "Identidad" de Arjona Delia
Todos los derechos reservados.
Copyright ©5/05/2019 by Arjona Delia


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3 de junio de 2019

POEMA LA PULGA Y LA ARAÑA

Este es un ejercicio en décima espinela. Se trata de crear un diálogo entre dos que nunca dialogarían.

LA PULGA Y LA ARAÑA
(Arjona Delia)

Arrastrando mis chancletas
y con los nervios de punta
en el techo estaban juntas
unas pícaras charletas.
Una está haciendo piruetas,
otra es un poco ermitaña,
me refriego las pestañas
porque no puedo creer:
charlando a más no poder
una pulga y una araña.

“Yo quisiera preguntar”
dijo la pulga, dudosa,
y la araña muy curiosa
se paró para escuchar.
“A la tarde oí hablar
al gato que vive enfrente”
dijo la pulga inocente,
“si mi oído no me engaña
dice que es gato y araña
parece que es su pariente”.

La despido, pulga ingrata,
pues su vida será corta,
porque nadie la soporta,
de eso usted no se percata.
La guerra hoy se desata,
yo me iría de inmediato,
ya lo siento en el olfato,
a la dueña escuché hablar
que tenía que comprar
matapulgas para el gato.






Publicado en el libro "Identidad "de Arjona Delia
Todos los derechos reservados.
Copyright ©04/05/2019 by Arjona Delia


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