POEMAS PARA LA MUJER Escritora Arjona Delia
Escritora Arjona Delia

19 de enero de 2019

Cartas de amor: Amor a la distancia


Hola, mi cielo, ¿cómo lo estás pasando en estos días preciosos? Espero que muy bien.
Y estoy muy bien y muy contenta por el hecho de que escribiste a casa. Ya ves que si  recibí tu carta es porque no me la rompieron. Igual, no te preocupes ya que por aquí las cosas respecto a tu papá y a ti, andan bien. Se podría decir que ‘excelente’ ya que de vez en cuando preguntan por ti. No sé si será por curiosidad o por qué.

Cartas de amor y poesía

En la carta que recibí hoy me decías que me enviaste un cuentito a tu casa, pero aún no lo he recibido, por lo que no podré decirte si me agrada. Pero en cuanto a los versitos o pequeñas poesías que me envías… bueno… contigo uno aprende. Dice el dicho que el alumno supera al maestro, ¿verdad? Pero en este caso a mí no me gustaría superar al maestro ya que como sabes, mi debilidad son las cosas pequeñas y no creo que algún día llegue a hacer poesías más largas.
Y gracias por decirme que te gustaron los dibujitos que te envío, pues me das incentivo para hacerte más. Gracias también por decirme que no gaste en cartas certificadas, que te las mande simples. ¿Hacemos un trato? Por cada carta que te mandaba antes certificada, ahora te enviaré cuatro cartas simples más y así saldré ganando: ¡cinco cartas por el mismo costo que una y estaremos más comunicados que antes! ¿De acuerdo, mi amor? Cariño, recuerda que aún te quiero y te necesito. Gracias por decirme que tú necesitas que yo te lo diga…






Publicado en el libro "Cartas de amor con poesía"
Todos los derechos reservados.
Copyright ©12/04/2016 by Arjona Delia


Attribution No Derivatives cc by-nd Esta licencia permite la redistribución, comercial y no comercial, siempre y cuando no sea alterada en lo absoluto dando crédito al autor.


17 de enero de 2019

Cartas de amor sencillas

¡Hola, amor!
Hoy sí llegó el cartero, ¿y sabes para qué? Para agradecerte la muy linda tarjeta del atardecer que me enviaste. Sinceramente me gustó muchísimo y me hizo pensar en el atardecer que tanto deseo compartir contigo. La carta que me diste también me agradó y me alegro de que mi carta te haya gustado, pero sinceramente, todo, todo lo que escribís es verdadero, aunque me da un poco de rubor reconocer que desee todas esas cosas.

Cartas de amor y poesías

 Pero, ¿sabes? Me ocurre que cuando me pongo a pensar, me asusto de mis propios pensamientos. Porque es la primera vez que deseo que otra persona haga lo que yo hago, que piense en lo que yo pienso, que desee las mismas cosas, que sienta lo que yo siento, que esa persona me quiera y que piense en mí… y esa persona “eres tú”.
¡Cómo me gusta llamarte por tu nombre! Te confieso algo: creo que las chicas del taller se dieron cuenta que algo raro me pasa, porque dicen que estoy mucho más pensativa que antes y a veces tengo ganas de gritarles ¡que sí! ¡que pienso en alguien y que ese alguien eres tú! Que pienso en tus hermosos ojos color cielo, chiquitos pero que tienen encerrados en ellos un gran amor, ojitos que me dicen tantas cosas a la vez, me dicen que me quieren, que me necesitan y me extrañan…
Querido amor… ¡cuánto, cuánto desearía que mis ojos te dijeran las mismas cosas y muchas más! Pero no se animan, no quieren hablar. Aún así, pienso que un poco más adelante se animarán a hablarte y te dirán que te necesitan, que te aman, que te extrañan, que ríen cuando tú ríes, que lloran cuando tú lloras, que sufren cuando tú sufres.
Mi amor: tan sólo pasan horas desde que no nos vemos y ya te extraño… ¿Por qué me pasa esto? ¿Por qué deseo que estés a mi lado todo el día? ¿Por qué deseo que caminemos juntos, aunque sea en silencio, pero unidos? ¿Por qué es que siento tantas cosas raras y no puedo explicarlas? ¿Por qué deseo escribirte, contarte y decirte tantas cosas? ¿Por qué es que siento que si tú me faltas es como si me faltara el aire y el agua? ¿Por qué?
Si tú lo sabes, ¡cállalo! Porque yo también lo sé, pero me da miedo reconocerlo. Este amor es cierto, no es un sueño, es una realidad.
Como te decía, tendremos muchas oportunidades de escribirnos, pero no sé, es un deseo nuevo en mí el de escribirte estas cartas aunque nos veamos regularmente.
Hay algo que me impulsa a expresar en un papel lo que siento, lo que pienso, algo que no me deja que me quede con mis sentimientos, algo que me guía y que guía a mi mano a escribir.
No quiero cerrar los ojos a la realidad. Sé que más adelante [cuando te trasladen a Magdalena] te voy a extrañar, y mucho. Voy a extrañar tu voz, el perfume de tu piel, tu mano sobre mi hombro, que tú camines a mi lado, que me digas que me quieres, tus hermosos ojos, pedacito de cielo que me miran…
Sé que los días pasan rápido, pero creo que tú me entiendes, que piensas igual que yo, que cuanto más te veo, más quiero verte… quizás mañana vuelva a escribirte otra carta igual que esta, pero bueno… creo que nunca me alcanzará el papel para expresarte todos mis sentimientos. Espero no haberte cansado al repetirte tantas veces que “te quiero”.
¡Buenas noches, mi amor!






Publicado en el libro "Cartas de amor con poesía"
Todos los derechos reservados.
Copyright ©12/04/2016 by Arjona Delia


Attribution No Derivatives cc by-nd Esta licencia permite la redistribución, comercial y no comercial, siempre y cuando no sea alterada en lo absoluto dando crédito al autor.


Entradas populares

È