Ella oculta su llanto, cubre sus marcas y esconde sus miedos. Ahoga su esperanza, pierde sus sueños, sólo desea escapar del violento. ¡Ya basta! No queremos "Ni una menos" Defendamos los derechos de las mujeres, que las leyes sean más duras y condene al violento.
¡SILENCIADAS!
(Arjona Delia)
Va vestida de negro y ocultando su llanto
escondiendo sus marcas entre angustia y dolor.
En su lucha constante de escapar del espanto
de romper sus cadenas, de tener el valor.
Va sumando tristezas, en su alma sin aliento
abatida en penumbra, ya no puede pensar.
Porque el vil y cobarde destruye pensamientos
con palabras hirientes, no la deja ni hablar.
El hombre en su locura va lanzando desprecio,
con odio envenenado lastima a su mujer.
Ahoga su esperanza, se convierte en un necio,
destruye todo sueño, ¡pues no sabe querer!
Con pedido de auxilio, suplicando clemencia
toda angustia la oprime, ya no quiere sufrir.
Se desgarra su alma, no quiere más violencia
ni cadenas, ni rejas, ¡porque quiere vivir!
La mujer es sagrada, se merece respeto,
mirar hacia adelante, recibir todo amor.
Que recojan sus penas, no más llanto en secreto,
que no tenga temores, ¡no le causes dolor!
Que no sea una sombra, no baje la mirada,
no mancilles su nombre, bríndale dignidad.
Que se sienta segura, que sea bien tratada
que abandone al violento, ¡que vuele en libertad!
Poema publicado en el libro "Identidad "de Arjona Delia
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Copyright ©04/05/2019 by Arjona Delia
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