¿Qué es el chantaje emocional?

El chantaje emocional es una practica de maltrato psicológico que denota debilidad e inseguridad en quien la practica y servidumbre en quien la padece. Es una de las prácticas de maltrato psicológicas más utilizadas.
De una forma consciente o inconsciente una persona presiona a otra para que diga, haga, sienta o piense de una determinada manera, aunque vaya en contra de sus principios y costumbres.

A lo largo de nuestra vida vamos a encontrarnos varias veces con individuos con estas características. Su deseo es mantenernos pendientes de sus sentimientos y deseos.
Estas personas actúan de esta manera porque son débiles e inseguras. Son posesivos y desean que los otros actúen a su antojo, no respetan la individualidad ni la libertad del otro.
Cuando uno no se comporta de la manera que ellos esperan se hacen las victimas, se sienten “solos y desgraciados".
Utilizan frase como “No me queres mas” “Después de todo lo que deje por vos…”

Mayormente tienen éxito en su accionar porque conocen los puntos débiles y los aspectos vulnerables de quienes les rodean.
Su espíritu posesivo, les hace mostrarse como víctimas cuando el otro no actúa según su capricho o antojo. Han aprendido a provocar la culpa, si no se hace lo que pretenden, se sirven de técnicas como amenazar con complicar la convivencia, poner fin a la relación, dicen que se abandonarán, se harán daño, se deprimirán o incluso que le pondrán fin a su vida.
Si no se cede a sus deseos califican al otro de egoísta, interesado, insensible o descuidado, en cambio cuando se accede a sus caprichos se desviven en alabanzas.
Muchas veces utilizan el dinero como arma para salirse con las suyas.
El chantaje emocional tiene consecuencias negativas para el que lo recibe, ya que afecta a la autoestima e incluso muchas veces hace que aparezca el sentimiento de culpa.

¿Qué debemos hacer cuando nos topamos con este tipo de persona?

Hacer lo que creamos mas adecuado y si coincide con lo que el individuo nos propuso, convencernos de que lo hacemos porque nosotros queremos.
Cuando la conversación se convierta en una continua presión de reclamos dejarles saber que no vamos a continuar escuchando. Que si no habla sin presionar nos retiraremos inmediatamente.
Mantenernos firmes. Si insiste, aplicar la técnica del disco rallado, repetir mentalmente, mientras él habla, la frase “No permitiré que me haga sentir mal, él es quien se comporta injustamente no yo”. Repetirla una y otra vez…
Cuando sintamos que la relación se esta volviendo en algo absorbente o agobiante ponerle fin a esa situación.

El cariño no solo se demuestra haciendo lo que el otro pide, sino aceptando a la persona y respetándola. Y ten en cuenta que si alguien realmente desea ayudarte de corazón jamás te pedirá nada a cambio.

Escrito por Arjona Delia