Una mujer que se esconde,
que oculta daños a todos,
evita mostrar los golpes,
se encuentra hundida en el lodo.
acumula las lesiones…
y se hunde más en el foso.
Suena la puerta. La llave.
Entra. Ruido. Se acerca.
Hoy ha bebido. Y lo sabe.
Una puerta que se cierra.
“¡Niña!¡Golfa!¡Mala madre!”
Pasos. Golpes. Ya se acerca.
“¿A dónde fuiste esta tarde?”
“A ningún sitio”- Contestas.
Temblor en la voz. Que pare.
Lloras. Temes. Gimes. Rezas.
“Por favor, que no me mate”.
Ya llegó. Abre tu puerta.
No sabes cómo mirarle.
“¡¿Qué haces?! ¡¿Por qué te encierras?!”
Solo tratas de explicarte.
Primer golpe. No lo yerra.
Huyes. Tratas de escaparte.
Te ha cogido. No te deja.
Y ya ha vuelto a golpearte.
Caes al suelo. Te ves muerta.
Ojalá se canse antes.
Te desprecia. No te quiere.
Siempre quiere controlarte.
No es amor lo que te tiene.
Los celos no son garante.
No lo hagas. Ni lo pienses.
Decídete a denunciarle.
Te echaste atrás otras veces.
Y ya ha vuelto a maltratarte.
Autor: Desconocido
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