Cuando miro cómo el viento
ese viento huracanado
sacude con fuerza el árbol
queriéndolo derrumbar
quisiera el viento parar.
Pero el árbol no se inmuta,
no protesta y no se asusta
usa tan solo su astucia,
cuando el viento impertinente
parece lo va a tumbar.
No se hace el engreido
ni lucha a brazo partido
contra tamaño rival
Sabe que el viento es más fuerte
y la lucha desigual.
Por eso usa su astucia,
se flexiona y contorsiona,
moviendo todas sus hojas,
y que pase el vendaval.
Usa la fuerza del viento
a favor y sin esfuerzo,
sabiendo que vencerá.
El árbol que se doblega
nadie lo puede tumbar.
Una lección mis amigos
de astucia y habilidad
pero también de humildad.
Autor: José de Arias Martínez ( "PePe Arias" )
No hay comentarios. :
Publicar un comentario